Pastelitos de chocolate y fresas sin gluten
¡Buenos días!
Este fin de semana a lo mejor quieres empezar a celebrar San Valentín con tu amor, o simplemente disfrutar de un pastel muy ligero y delicioso. No contiene harina y por lo tanto es apto para los que sufren intolerancia al gluten.
Consiste de un bizcocho de mousse de chocolate y relleno de nata y fresas frescas.
Se puede hacer de diferentes formas, pero como estamos en una época muy romántica, he preparado pastelitos con forma de corazón.
Necesitas pocos ingredientes.
Bizcocho:
115 gramos de chocolate negro
75 gramos de azúcar
6 huevos
3 gotas de limón
Relleno de nata y fresas frescas:
100 gramos de fresas
3 cucharadas de zumo de limón
4 hojas de gelatina
2 decilitros de azúcar
4 decilitros de nata para montar
Empieza por el relleno.
Deja las hojas de gelatina en remojo en agua fría durante 5 minutos.
Corta las fresas en trocitos y échalos en una cacerola pequeña junto con la mitad del azúcar y el zumo de limón. 
Lleva la mezcla a ebullición y deja hervir a fuego lento durante 5 minutos. 
Aparta del fuego, escurre las hojas de gelatina y échalas a la mezcla caliente. Remueve y deja enfriar.
Monta la nata con la otra mitad del azúcar y añade con cuidado la mermelada de fresa. Si lo quieres más rosa por lo de San Valentín, echa un poco de colorante rosa o rojo.
Extiende la masa sobre un papel vegetal e introdúcela en el congelador durante 2 horas o más.
Ahora el bizcocho.
Derrite el chocolate en el microondas o al baño maría. Déjalo enfriar, pero que no cuaje.
Separa las yemas de las claras.
Deja aparte 2 cucharadas de azúcar.
Echa las yemas de huevo y el azúcar restante en un bol y bate hasta conseguir una mezcla muy ligera y blanquecina, durante por lo menos 10 minutos si utilizas varillas eléctricas normales.
Añade el chocolate frío.
Mezcla un par de minutos.
La masa queda bastante espesa.
Ahora, bate las claras con las 2 cucharadas de azúcar y las gotas de limón.
Si utilizas el mismo bol de antes, friégalo muy bien con agua caliente y jabón – si queda el menor rastro de la mezcla anterior, las claras no se montarán bien.
Monta las claras a punto de nieve y échalas a la mezcla de yemas y chocolate. Mezcla con mucho cuidado para que no salga el aire de la masa.
Forra un molde de unos 25x30 centímetros con papel vegetal.
Echa la mousse de chocolate en el molde y hornea a 175ºC durante 16 minutos.
Deja enfriar dentro del molde, encima de una rejilla.
Cuando esté frío, dale la vuelta y quita el papel vegetal. Tengo que admitir que hoy me he olvidado de este paso y por eso mis pastelitos no presentan un aspecto "10"…
Con un cortapastas, corta trozos del bizcocho. Si haces corazones, te saldrán menos trozos, lógicamente. Si quieres aprovechar todo el bizcocho, córtalo en cuadrados.
Ahora corta trozos de la masa de fresas con el mismo cortapastas.
Coloca un corazón de fresa encima de uno de chocolate…
…y luego otro de chocolate encima.
Para adornar, puedes cortar otro corazón más pequeño de fresa…
…o dejarlo tal cual.
También puedes echar corazoncitos comestibles por encima :)
Si no se comen enseguida, no olvides guardar tus pastelitos en la nevera.
Disfruta del fin de semana pre-Valentín :))
¡Que aproveche!